Tecnica de esponjado sobre paredes
La decoración a la esponja es, en esencia, una técnica en la que se utilizan
varios colores, que se aplican sobre toda la superficie, uno tras otro, con una
esponja de textura suave.
El efecto producido es moteado, y las combinaciones de color son ilimitadas.
La textura natural de las esponjas de mar, mullida y abierta, fue lo que
primeramente inspiró la técnica.
Las esponjas naturales son ideales para este trabajo, pero se puede simular
el efecto utilizando esponjas sintéticas.
Conviene experimentar combinaciones de colores hasta conseguir el resultado
deseado, ya sea con colores suaves y tonos pastel o con colores vivos y
contrastados. En las paredes lisas - pintadas o enyesadas - se
consigue, al aplicar la esponja, un resultado inmediato. Otros tipos de
revestimiento, como la madera, la cerámica, el cristal o los laminados, también
pueden ser tratados, lo único que se necesita es aplicar las pinturas
adecuadas.
Elección del color:
La gran ventaja del esponjado es que el grado de dominio de un color sobre el
otro puede variar y, por lo tanto, es fácil modificar el aspecto a medida que se
va adelantando el trabajo. El color de base se puede ver en mayor o menor
medida, según guste.
Al escoger un esquema de color para una habitación, se puede lograr un sutil
efecto coordinado utilizando para una de las capas un tono que esté presente en
la tapicería o en las cortinas. Para ampliar el efecto, se deben usar los mismos
colores en diferente orden para tratar accesorios de la habitación tales como
lámparas o estanterías. El esponjado con sólo un color encima de una base queda
sencillo, poco sofisticado, a veces incluso poco adecuado, ya que el resultado
es como un suave sombreado; añadir una segunda capa de punteado con esponja
es mas recomendado.
Pared y marcos con tonos arena
Esponjado realizado en tres tonalidades diferentes, paredes con tono base claro, marco exterior con tono mediano y marco interior con tono oscuro.